Institucional

El balance de 2022 de la terminal registra buenas cifras en todos los ámbitos en los que actuó la terminal

A pocos días del final del año, TCP, la empresa que administra la Terminal de Contenedores de Paranaguá, ya está contando sus logros en 2022, y puede decir que fue un buen año en términos de productividad, mejoras e implementación de proyectos sociales para la comunidad costera de Paraná.

Ya sea mediante acciones socioambientales, apoyo al deporte o financiación de proyectos a través de leyes de incentivos, este año TCP demostró una vez más que valora la comunidad en la que opera y quiere promover su desarrollo para que, codo con codo, puedan crecer de forma sostenible.

La empresa actuó activamente en la continuidad de más de 60 proyectos socioambientales en curso, que benefician no sólo a la población de la región, sino también al medio ambiente y a la economía local. La Bolsa Solidaria, por ejemplo, permite a los residentes intercambiar materiales reciclables por alimentos de la cesta básica y productos de higiene personal. Las mejoras en escuelas, centros comunitarios y aldeas indígenas también formaron parte de las inversiones para la comunidad. La obra más reciente, que contó con el apoyo del PCT, fue la construcción de 30 casas para las comunidades indígenas de Paranaguá. Las obras se realizaron en siete meses y fueron financiadas íntegramente por la empresa. Unos 130 indígenas se beneficiarán del proyecto.

La empresa también actuó en favor de la cultura y el deporte, apoyando proyectos mediante leyes de incentivos fiscales, como la Orquesta Filarmónica Antonina, la Asociación de Padres y Amigos del Fútbol Sala (APAF), y apoyando a la bodyboarder local Isabelli Nunes, que obtuvo el segundo puesto en el campeonato mundial.

Con enfoque ambiental, el Plan de Arborización de Paranaguá, entregado en 2021 por la TCP y sancionado este año por la alcaldía, ofrece un panorama de la situación actual del municipio, que cuenta con 8.260 árboles, pero pretende duplicar ese número en los próximos años. Según la supervisora de proyectos medioambientales de TCP, Katlyn Eliege, la aplicación del plan reportará numerosos beneficios a la ciudad. «Desde la remoción y poda de aquellos árboles que representan riesgos para los residentes hasta la mejora en la forestación, que impacta en el paisajismo y puede disminuir la temperatura en Paranaguá».

Esas iniciativas están en consonancia con el objetivo de TCP de promover la concienciación de la comunidad en torno a la preservación del medio ambiente, motivo por el cual la empresa recibió el sello Clima Paraná, un proyecto diseñado por la Secretaría de Desarrollo Sostenible y Turismo del estado. El certificado se concede a las organizaciones que se adhieren al Registro Público Estatal de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero. La empresa fue galardonada con la máxima categoría en la que está clasificada.

«Los programas forman parte del legado que la empresa quiere dejar a la ciudad», explica el supervisor. «La Terminal está comprometida con el desarrollo sostenible en los ámbitos social, medioambiental y económico. Queremos obtener resultados cada vez mejores para todos los implicados, ya sea la comunidad, los empleados o nuestros clientes», añade.

Registros TCP

Incluso antes de que empezara diciembre, la terminal movía un millón de TEU y ganaba premios y otros récords en un año histórico. La inversión para alcanzar los objetivos fijados para 2022 es a largo plazo. Desde hace años, la dirección de la terminal da prioridad a la mejora de las infraestructuras, la tecnología y la formación de los equipos para aumentar la capacidad y la calidad de las operaciones. Y el reconocimiento a este esfuerzo llegó en forma de premio: TCP obtuvo el 2º puesto en la categoría «Cumplimiento de la normativa: Arrendamiento» del Premio ANTAQ, siendo la primera en la operación de contenedores. El premio destaca a las organizaciones portuarias y de vías navegables con las mejores prácticas de explotación y gestión.

Otro resultado de estas inversiones fue la sucesión de récords batidos por TCP, ya fuera en movimiento o en tamaño de los buques. Sólo en el mes de agosto, la terminal batió dos récords de productividad en un solo buque: 202 movimientos por hora (MPH) y 158 PMPH (productividad de atraque), es decir, movimientos desde que el buque atraca hasta que sale. Esta cifra fue la más alta registrada en la costa este de Sudamérica en lo que va de año. Pero la cosa no quedó ahí.

En los meses siguientes, la terminal recibió el mayor buque de extremo a extremo de la historia de la terminal. Con 347 m de eslora y 45 m de manga, el portacontenedores APL Yangshan, del armador francés CMA CGM, requirió una operación en dos turnos, en la que participaron 170 empleados y cuatro portêineres (grúas de muelle para mover contenedores en los buques).

Por último, TCP contó con la llegada del mayor buque en capacidad de su historia. El portacontenedores Rio de Janeiro Express, del armador alemán Hapag Lloyd, tiene 335 metros de eslora y 51 metros de manga, con capacidad para transportar hasta 13.312 TEU (contenedores de 20 pies). El Rio de Janeiro Express es también el de mayor capacidad para transportar carga refrigerada que ha atracado nunca en la terminal: tiene 2.220 enchufes. Con el aumento del calado y la supresión de las restricciones de amarre, TCP recibe buques cada vez más grandes. Además, la terminal ha realizado importantes inversiones en infraestructuras y en contratación de personal para responder con agilidad a la creciente demanda.

Mayara Locatelli